miércoles, 9 de diciembre de 2009

Tonterías


Viendo una estrella, o mejor dicho «las» estrellas, del firmamento me doy cuenta de lo insignificantes que somos, me doy cuenta que aunque uno se rompa en llanto el universo permanece inmutable, que todo lo que uno considera importante es menos que nada. Que una palabra sea de halago o insulto, que un amor se consiga o se pierda, sólo tiene importancia porque nosotros mismos se la damos y no porque este escrito en algún lado de la Creación que algo sea bueno o malo. Somos los dioses que constantemente le damos el aliento de vida a millones de adanes (personas, situaciones, palabras, momentos). Ahora que escribo me gustaría pedirle al que esta leyendo que nunca pierda el valorar una amistad, un gesto amable, un beso o... a la/las personas que lo acompañan. Aveces uno cree que lo que se tiene en la vida ésta tiene obligación de darlo.... nada más lejos de la realidad, lo que uno tiene siempre es un regalo, algo que se puede también ganar con esfuerzo, pero que en el fondo y aun así no es de uno. Pensaba en este post poner la foto de una persona que me hizo encarar en el ultimo año mi lado más infantil, pero es increíble que el solo verlo me provoca un dolor difícil de soportar y aun me quiero negar a olvidarlo. Lo que uno se niega a soltar es porque es algo de «uno mismo que se niega a abandonar» dicen las malas lenguas, si es así me gustaría saber que es.
Hay gente que esta triste en compañía, que no se siente conforme con los amigos que tiene, sino que más bien es otra que cosa que no es ésta la que espera, y no hay soledad más atroz que esa, porque sino se tiene a nadie uno alberga la esperanza de que cuando se ocupe el lugar vació tal vez la felicidad llegara. Pero cuando éste es ocupado y se toma conciencia que nada de afuera en realidad puede llenar ese espacio (novia/o, amigos/as) y llevar a la felicidad uno la verdad no entiende (y mucho menos comprende) que esta pasando. Se nos educa para vivir con ideales prestados... ideales que no tienen nada que ver con uno. Hay tipos que tal vez desean pintar, cantar.... lo que tenga que ver con la veta artística, pero como se dice que la felicidad se llega entre más plata se tenga se abandona el verdadero deseo.... y se cae en un error grosísimo. Es preferible cantar por las calles, pintar y exponer lo que se desea por monedas si en un caso no se logra el «ideal», pero vivir con la vocación del alma, lo contrario es totalmente inútil y estúpido.
Bueno.... tengo ganas de escribirlo: Gracias Matías por haber estado el momento que fue justo y necesario y ni un minuto más. Gracias por haberme permitido intercambiar unas palabras (aunque solo sea en el msn) contigo, gracias por haberme enseñado cosas que jamás pretendiste enseñarme. Gracias Luis Matías Dome..... Mil gracias.

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